Tratamiento de la epilepsia canina y cómo controlarla
¿Le han diagnosticado epilepsia a su perro? La epilepsia es la enfermedad neurológica más frecuente en los perros. Aunque no siempre se encuentra una causa subyacente, tenga la seguridad de que existe un tratamiento adecuado de la epilepsia canina para controlar las frecuentes convulsiones de su perro.
¿Qué es la epilepsia en los perros?
En primer lugar, ¿qué son las convulsiones? Las convulsiones son explosiones inusualmente fuertes de actividad eléctrica en el cerebro. Durante un episodio, su perro puede perder el conocimiento, ponerse rígido, desplomarse, retorcerse y remover las patas. También es frecuente que orine o defeque. Un ataque puede durar unos segundos o unos minutos, y puede ser muy molesto tanto para la mascota como para sus padres.
"El término epilepsia suele referirse a la epilepsia idiopática, un trastorno caracterizado por convulsiones recurrentes sin causa identificable", afirma el Dr. Michael Wong, fundador y neurólogo veterinario de Southeast Veterinary Neurology.
Irónicamente, la epilepsia idiopática es la "causa" más común de las convulsiones en los perros. La epilepsia en los perros es muy probablemente genética y se manifiesta entre el año y los cinco años de edad como convulsiones de todo el cuerpo. Suele haber un patrón regular en los episodios, aunque los perros actúan de forma completamente sana entre ellos y también presentan un examen neurológico normal.
¿Cuál es el mejor tratamiento para la epilepsia canina?
El tratamiento adecuado de la epilepsia canina depende del diagnóstico preciso de la causa subyacente. Por lo tanto, es importante consultar a un neurólogo veterinario.
Diagnóstico de la epilepsia en perros
En primer lugar, queremos saber cuándo se producen los ataques, cuánto duran y con qué frecuencia ocurren. También es importante saber qué hizo su perro antes, durante y después del episodio.
A continuación, los exámenes físicos y neurológicos nos ayudan a reducir las posibilidades al tiempo que arrojan luz sobre cuestiones que pueden o no estar relacionadas con las convulsiones de su perro.
El diagnóstico comienza con un análisis básico de sangre y orina, junto con radiografías de tórax y abdomen para descartar ciertas causas. Si, después de esto, no hemos encontrado una causa - o si su perro tenía un examen neurológico anormal - podemos sugerir pruebas más avanzadas. La IRM (resonancia magnética) de alto campo es la mejor forma de identificar problemas en el interior del cerebro, y un análisis del LCR (líquido cefalorraquídeo) puede descubrir otros problemas.
"La única forma de diagnosticar definitivamente la epilepsia es descartar todas las demás causas. La epilepsia idiopática es un diagnóstico por exclusión", explica el Dr. Wong.
Tratamiento de la epilepsia en perros
Una vez que su perro ha sido diagnosticado de epilepsia, su neurólogo veterinario podrá empezar a desarrollar un plan de tratamiento adecuado.
Si se descubre una causa subyacente de las convulsiones de su perro, es imprescindible abordarla al mismo tiempo. Mientras tanto, se utiliza medicación anticonvulsiva para controlar la frecuencia, gravedad y duración de los episodios. Existen varias opciones, y su neurólogo le explicará cuál es la más adecuada para su perro.
Todos los medicamentos anticonvulsivos tienen efectos secundarios. El tratamiento de la epilepsia canina consiste en encontrar el equilibrio adecuado entre la actividad convulsiva y los efectos secundarios de la medicación. Este equilibrio es único para cada perro, y para encontrar el plan de tratamiento óptimo para su perro hay que probar y equivocarse.
¿Cómo se trata la epilepsia canina?
Los perros epilépticos pueden vivir una vida larga y feliz, pero es importante tener en cuenta que el tratamiento de la epilepsia canina casi siempre requerirá un compromiso de por vida. Aparte de administrar la medicación, es posible que se sienta algo impotente, pero saber qué hacer y qué no hacer durante un ataque puede ayudar:
- NO sujete a su perro durante los episodios y mantenga las manos alejadas de su boca. El tacto no le aliviará y existe la posibilidad de que le muerda.
- Asegúrese de que su perro no pueda hacerse daño con nada ni caerse de los muebles, las escaleras o el agua.
- Anote siempre cuánto dura la crisis. La mayoría de las crisis cesan en 30 segundos o un minuto.
No es necesario que llame al veterinario cada vez que su perro tenga un episodio. Sin embargo, si es la primera vez que su perro tiene una crisis o empieza a tenerlas con más frecuencia de lo habitual, hágalo.
TENGA EN CUENTA: Si una convulsión dura más de tres minutos, si su perro tiene más de dos convulsiones en 24 horas o si cree que su perro ha estado expuesto a una toxina, se trata de una situación de emergencia. Lleve a su perro a un centro veterinario inmediatamente. NO ESPERE a que termine una crisis de más de tres minutos.
¿Dónde puedo encontrar tratamiento para la epilepsia canina?
Aunque hay pruebas anecdóticas que apoyan la dieta, la acupuntura, los suplementos y el CBD para el tratamiento de la epilepsia canina, es fundamental consultar a un neurólogo veterinario para descartar las causas subyacentes y llegar al plan de tratamiento adecuado para su perro.
Los neurólogos veterinarios son expertos en el diagnóstico y tratamiento de la epilepsia en perros. En Southeast Veterinary Neurology, nuestros expertos certificados están aquí para ayudarle a usted y a su perro a vivir juntos una vida larga y feliz. Póngase en contacto con cualquiera de nuestras sedes en Miami, Boynton Beach, Jupiter o Virginia Beach para encontrar el mejor tratamiento de la epilepsia canina para su mejor amigo.